El mercado de recambios para el automóvil facturó el pasado año por valor de 5.125 millones de euros, según los datos de la Asociación Española de Proveedores de Automoción (SERNAUTO). Esta cifra representa un incremento del 12,3%, respecto a 2020, lo que significa recuperar los niveles pre-COVID.
En su conjunto, el sector de proveedores de automoción facturó el pasado año 32.085 millones de euros, un 6,3% más que en 2020, pero aún por debajo de las cifras prepandemia. Las exportaciones alcanzaron los 19.669 millones de euros, un 10% más que en 2020. De este modo, las ventas al exterior representan en la actualidad el 61,3% de la facturación del sector de las empresas de SERNAUTO.
Por su parte, las ventas en el mercado nacional se situaron en 12.416 millones de euros. De ellos, 7.291 millones correspondieron al suministro de equipos y componentes a los fabricantes de vehículos, que sufrió una caída del 5,8%. Los proveedores de automoción vinculados a la cadena de suministro se vieron afectados por el fuerte descenso de la producción de vehículos (un 7,5%). Por el contrario, la facturación de los fabricantes de recambios se ha visto incrementada debido a la reactivación de la movilidad entre las diferentes olas de la pandemia, de ahí su mejor rendimiento.
Se mantiene el nivel de inversiones
A pesar de esta complicada coyuntura, los proveedores aumentaron la inversión destinada a I+D+i en un 8,5%, alcanzando, con un total de 1.164 millones de euros. Esto supone un 3,6% de la facturación de ese año y el triple que la media industrial. De este modo, se mantiene también la media de inversión del 4% en los últimos cinco años.
Igualmente, el sector invirtió 1.361 millones de euros en incrementar y mejorar sus capacidades productivas, con el objetivo seguir siendo una industria competitiva, innovadora y adaptada a las necesidades de sus clientes.
A 31 de diciembre, el sector daba empleo a un total de 326.600 personas, directa e indirectamente. El empleo directo generado por el sector se situó en 201.450 trabajadores, un 5,2% menos que en 2020. Esta pérdida de empleo ha sido debida en gran medida a la finalización de los ERTEs, la reducción de actividad y el cierre de algunas plantas.
“Los datos […] muestran el enorme esfuerzo que estamos haciendo los proveedores para poder afrontar los problemas globales y no quedarnos atrás en esta carrera mundial que es la automoción. A pesar de la crisis de los semiconductores, el encarecimiento de las materias primas o la desorbitada subida de los costes energéticos y logísticos, hemos podido mantener la producción y la mayoría de los empleos”, explicó el Presidente de SERNAUTO, Francisco Riberas.
Por su parte, José Portilla, Director General de SERNAUTO, resaltó la importancia de la colaboración público-privada para acelerar la recuperación del sector. “Es imprescindible el apoyo de la Administración pública a este sector estratégico de la economía española. Debemos ser capaces de que los fondos europeos lleguen de forma rápida y eficaz a las empresas del sector para que no se queden atrás por todas las dificultades que en estos momentos están atravesando. Como destacamos en nuestra Agenda Estratégica 2025, necesitamos que el Gobierno apueste de forma firme por esta industria compuesta por muchísimas pymes que tanto aportan en las diferentes regiones en las que están implantadas y que en estos momentos están sufriendo las consecuencias de la pandemia y de todas las circunstancias ajenas que han ido surgiendo”, dijo.