Sernauto, la Asociación Española de Proveedores de Automoción, acaba de emitir un comunicado subrayando su impulso hacia la Industria 4.0 sostenible, con una serie de recomendaciones: “La pandemia de la COVID-19 ha acelerado la transformación en la que la industria española de componentes de automoción ya estaba inmersa. Como sector referente en Industria 4.0, la digitalización forma parte del ADN de los proveedores, que en los últimos años la han implementado en sus fábricas y líneas de producción, lo que ha originado beneficios en materia de sostenibilidad”.
Al respeto, Sernauto señala en su comunicado que “así quedó patente en el workshop que se ha celebrado en el marco de la Comisión de Negocio Responsable de SERNAUTO, la Asociación Española de Proveedores de Automoción. En él, empresas líderes del sector presentaron sus buenas prácticas y casos de uso de cómo la aplicación de la digitalización contribuye a la consecución de objetivos relacionados con la eficiencia energética, la reducción de residuos y los “cero accidentes”, entre otras muchas cuestiones”.
Sernauto prosigue apuntando que “en este sentido, surge el concepto “Industria 4.0s” (Industria 4.0 elevada a la “s” de sostenible), acuñado por la Asociación, para hacer referencia a esa doble transición hacia una industria digital y sostenible. Esto supone avanzar hacia el liderazgo digital y hacia la neutralidad climática y poniendo en marcha mecanismos de transición justa que no dejen a nadie fuera. La escucha activa se convierte en un aspecto fundamental. Como resaltó el director de ECODES, Víctor Viñuales, “las empresas del siglo XXI que van a sobrevivir van a ser las que mejor escuchen a todos”. Hizo hincapié en la importancia que tiene escuchar a los grupos de interés y a la sociedad por parte de las empresas: “Si miramos hacia el pasado, las que no escucharon, colapsaron.”; y trabajar de manera conjunta en la recuperación sostenible.”
“Hay que entrenar la mirada para ver oportunidades”, afirmó. Uno de los aprendizajes de esta crisis es que la industria española debe tener más peso, debe volver a ser parte central de nuestra economía. Además, están surgiendo oportunidades cruzadas a través del mestizaje en dos direcciones: nuevas empresas que entran en el sector; y, a su vez, empresas de la automoción que pueden entrar en nuevos sectores. “Las empresas quieren formar parte de la solución y lo percibe la sociedad; tenemos un programa común y todos somos corresponsables”.
Una vez finalizada la ponencia de Viñuales, varias empresas de la Comisión compartieron una serie de buenas prácticas relacionadas con los retos de la industria 4.0 Sostenible. Inés Ruiz de Arana, gerente de Sostenibilidad de Gestamp, presentó el proyecto que han desarrollado para la mejora de la eficiencia energética, aprovechando las oportunidades que ofrecen las nuevas tecnologías para reducir sus emisiones.
Antonio Molón, director de Calidad de Zanini, expuso el proyecto de cromado de piezas por medio de nanotecnología, que les está facilitando una mejor reciclabilidad y una reducción de residuos en el proceso de producción. Susana Portillo, directora de Mejora Corporativa de Grupo Antolín, presentó el proyecto para la integración de las personas y la industria 4.0, permitiendo conectar a las personas con la tecnología.
Por último, intervino Jaume Homs, HP Iberia 3D Regional Business Manager, que expuso datos y referencias de cómo la fabricación aditiva o impresión 3D puede conseguir una reducción del 95% de la huella de carbono.
Con todas las ideas compartidas, se ha formulado una serie de recomendaciones para caminar conjuntamente hacia la Industria 4.0s, como son:
- Invertir en capacitar y formar a los empleados y, en especial, a los colectivos de riesgo para garantizar su empleabilidad.
- Establecer objetivos claros y medibles, tener información en tiempo real.
- Implantar mecanismos de escucha activa con empleados, clientes, sociedad, regulador, así como otros agentes.
- Fomentar el mestizaje con otros players para alcanzar soluciones tecnológicas sostenibles. Establecer alianzas con terceros.
- Valorar la rentabilidad de la inversión teniendo en cuenta su impacto económico, social y ambiental.
- Fomentar iniciativas que sean escalables y replicables en otros procesos productivos, productos de la compañía o en otras empresas de la cadena de valor bajo el principio de solidaridad empresarial.
- Compartir e intercambiar buenas prácticas. Fomentar la colaboración sectorial e intersectorial.
- Anticipar la integración de las competencias tecnológicas necesarias para el desarrollo eficaz de la tecnología.
- Digitalizar las rutinas de fábrica que ya existen para ser más eficientes. La digitalización como herramienta para la mejora continua de los procesos.
- Atreverse al cambio.
- Abordar la industria 4.0s con visión de negocio sin colisionar con el interés general y sensibilizar sobre sus beneficios a otros stakeholders”