Continental Automotive ha ampliado su gama de sensores de temperatura de gases de escape (sensores EGT) con nuevas referencias para las marcas del grupo VGA: Volkswagen, Audi, Skoda y Seat. Además, la firma también amplía su catálogo de sensores EGT para la marca Opel y ahora incluye opciones para modelos como Astra, Corsa y Mokka.
Continental ya comercializaba en el mercado sensores de temperatura para algunos modelos de Mercedes, Volvo y el grupo VW. Con esta ampliación el catálogo de sensores de la compañía se amplía con cuarenta y ocho nuevos modelos.
Los modernos vehículos, tanto de gasolina como diésel, dependen de los sensores EGT para la gestión del motor y el posterior tratamiento eficiente de los gases de escape. Estos elementos proporcionan información sobre la temperatura del flujo de gases de salida del motor y de otros componentes como los turbocompresores, catalizadores, filtros de partículas diésel y sistemas de reducción de óxido de nitrógeno (sistemas de reducción NOx).
El funcionamiento de estos sensores consiste en detectar cuando los componentes del vehículo se sobrecalientan y así poder actuar y protegerlos ante posibles daños. Asimismo permiten reducir el consumo de combustible y las emisiones contaminantes a través de la monitorización de las temperaturas de funcionamiento en el sistema y proporcionando valores de medida fiables para la unidad de control del motor.