La facturación de los talleres, por debajo de los niveles de 2019

Los 5.915 millones de euros de ingresos en el primer semestre representan una caída del 7% en relación a los registrados en el mismo período de 2019, según CONEPA.

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La facturación de los talleres de automoción ascendió a 5.915 millones de euros en el primer semestre, un 7% menos que en el mismo período de 2019, según estimaciones de la patronal CONEPA. “La comparativa con el 2020 no nos parecía la más acertada para analizar correctamente la evolución real de nuestro sector, dado que el período estudiado coincide de pleno con los peores momentos de la crisis sanitaria, cuando la mayor parte de los talleres se vieron obligados a cerrar por falta de demanda”, indica Víctor Rivera, secretario general de la federación.

Los datos de facturación de los talleres están condicionados por los efectos de la borrasca Filomena, que sitúan al mes de enero del presente año como el peor desde que la federación tiene registros. También han influido las restricciones a la movilidad en toda España, especialmente entre enero y marzo. En este sentido, CONEPA constata una fuerte diferencia en resultados entre el primer trimestre, con una caída media superior al 12%, y el segundo, mucho mejor, aunque en cifras todavía negativas (3%). “El mes de junio merece un tratamiento muy distinto. Claramente se define como el mejor mes de los últimos 24, con balance positivo para la casi totalidad de las empresas del sector”, apuntan

El análisis de los datos de facturación de los talleres arroja para CONEPA otras interesantes conclusiones. Así, de los dos grandes apartados en la facturación del taller, mano de obra y piezas de recambio y otros materiales necesarios para sus operaciones, el primero sufre mucho más que el segundo el retroceso global. La causa más evidente de este resultado parece estar en las actividades relacionadas con la llamada mecánica rápida (mantenimientos generales, que requiere menos tiempo de mano humana en las operaciones, y una mayor aportación de recambios, lubricantes y neumáticos), y que es el subsector que mejor evolución presenta, un 4% por debajo de 2019, y el único con crecimiento (aunque mínimo, un 0,5%) en el segundo trimestre del año en curso, siempre en comparación con 2019.

En la otra cara, está en el subsector de carrocería —chapa y pintura—, el más perjudicado por la caída en la demanda de sus servicios durante todo el semestre. En electromecánica general, fundamentalmente reparaciones por avería, se constata una sensible disminución del número de operaciones, coherente también con el menor kilometraje realizado por el parque español.

Se mantiene el nivel de empleo a pesar de la caída de facturación de los talleres

La ocupación laboral global —unos 146.500 trabajadores— es similar a la registrada a final de 2020, con una tendencia ligerísima al crecimiento en los meses de mayo y junio. CONEPA recuerda que la crisis de la COVID-19 se saldó con una caída en el empleo de 5.500 personas en 2020.

En las encuestas realizadas por CONEPA se denota una gran preocupación de los talleres por su futuro, al solaparse la crisis sanitaria, con repercusión negativa en múltiples sectores, con el cambio de modelo en el mundo del automóvil, una transformación específica que no solo es tecnológica sino social.

“Desde CONEPA lanzamos siempre un mensaje motivador para nuestro colectivo: no va a haber cambios disruptivos en el mundo del taller, por lo menos en los próximos diez años. Eso da margen a las empresas del sector para adaptarse a los nuevos tiempos. Sin embargo, son constantes los mensajes que se reciben cada día, muchos de ellos nada realistas por otra parte, pero que van minando la moral de las pymes y resultan desalentadores. No ayudan nada en un proceso de transformación en el que es importante la serenidad a la hora de tomar decisiones ya, decisiones necesarias y estratégicas con respecto a un futuro diferente a largo plazo pero para el que hay que comenzar a prepararse sin dilación”, concluye Víctor Rivera.