OPEN, la Organización Profesional de Especialistas del Neumático, acaba de emitir un comunicado en el que avisa sobre “el peligro de la cristalización de los neumáticos” y recuerda que “los neumáticos no tienen fecha de caducidad”, pero con el paso del tiempo pierden propiedades, amén de recomendar siempre a los conductores que, ante cualquier duda, lleven su vehículo al taller.
Los especialistas de OPEN explican que “con el paso del tiempo el neumático puede disminuir sus propiedades químicas perdiendo elasticidad para pasar a cristalizarse. En este estado se reduce drásticamente la adherencia, aumentando la distancia de frenado, aumentando la probabilidad de sufrir aquaplaning con precipitaciones y comprometiendo la seguridad del vehículo.La cristalización puede producirse cuando nuestro vehículo pasa mucho tiempo a la intemperie, con altas temperaturas y radiación solar, con humedades bajas y por el envejecimiento del neumático”.
¿Cómo ver si los neumáticos están cristalizados?
A la hora de detectar si un neumático está cristalizado, los expertos de OPEN añaden que “su aspecto no cambia, ni sufre un desgaste visual, no obstante, pierde el agarre pues, ahora es totalmente rígido y no elástico. Una sencilla y simple prueba para comprobar su estado es hundir la uña del dedo en el dibujo del neumático, la cual nos indicará el grado de cristalización. Si la goma está blanda y podemos hundir la uña no está cristalizado. En el caso de que no consigamos hundirla, nuestros neumáticos habrán sufrido este peligroso proceso de cristalización, debiendo cambiarlos de inmediato. Si no estamos seguros de la cristalización o no de nuestros neumáticos, debemos consultar a nuestro mecánico de confianza para saber si ha llegado el momento de sustituirlos por unos nuevos”.
Caducidad
En cuanto a la caducidad, OPEN explican que “los neumáticos son un producto de caucho que no tiene fecha de caducidad, pero que con el paso del tiempo sufre una pérdida de sus propiedades. En general, se recomienda que un neumático que supere los cinco años de uso sea revisado por un especialista y se sostiene que transcurridos diez años desde su fecha de fabricación irán perdiendo propiedades, no ofreciendo la misma seguridad; no obstante, todo dependerá de su utilización y almacenamiento. En estas circunstancias lo recomendable es evitar que los neumáticos reciban mucha radiación solar, se expongan a temperaturas extremas y evitar el uso de neumáticos con más de diez años de edad. La única solución para solventar la cristalización de los neumáticos es cambiarlos por unas gomas nuevas, pudiendo después realizar las prevenciones anteriores para no sufrir el estado de cristalización de nuevo.