Bosch y Daimler han obtenido la autorización de las autoridades competentes de Baden-Württemberg (Alemania) para los aparcamientos sin conductor y sin supervisión humana, lo que supone un nuevo hito en el camino hacia la conducción automatizada.
Bosch y Daimler comenzaron a desarrollar un sistema de aparcamiento sin conductor, totalmente automatizado en 2015 y en el verano de 2017, su solución piloto en el aparcamiento del Museo Mercedes-Benz de Stuttgart, alcanzó un importante hito: el aparcamiento automatizado en condiciones reales, con y sin conductor al volante, fue presentado al público por primera vez.
Este estreno fue seguido de una intensa fase de pruebas y puesta en marcha. Desde el pasado año, los visitantes del museo han podido utilizar el servicio de aparcamiento, acompañados por personal de seguridad formado para esta iniciativa, y compartir su experiencia
El servicio de aparcamiento automatizado es accesible a través de una aplicación de Smartphone y no requiere un conductor por motivos de seguridad. Esto la convierte en la primera función de aparcamiento SAE Level 4 sin conductor, totalmente automatizada del mundo y aprobada oficialmente para uso diario.
“Esta decisión de las autoridades demuestra que innovaciones como el parking automatizado, son posibles en Alemania. La conducción y el aparcamiento sin conductor son elementos importantes para la movilidad del mañana. El sistema de aparcamiento automatizado muestra hasta dónde hemos avanzado en esta vía de desarrollo”, comenta Markus Heyn, miembro del Consejo de Administración de Robert Bosch GmbH.
La seguridad como máxima prioridad
Desde el principio, la máxima prioridad de Bosch y Daimler para el servicio de aparcamiento sin conductor, ha sido la seguridad. Dado que todavía no existe un proceso de autorización oficial para las funciones de conducción automatizada que no requieren conductor, las autoridades locales —la autoridad administrativa regional de Stuttgart y el Ministerio de Transporte del Estado de Baden-Württemberg— supervisaron el proyecto desde el principio, junto con expertos de la autoridad de certificación alemana TÜV Rheinland. Su objetivo era evaluar la seguridad de funcionamiento de la tecnología del automóvil y de los aparcamientos.
El resultado es un concepto de seguridad integral con los ensayos adecuados y criterios de admisión, que puede aplicarse más allá de este proyecto piloto. En el concepto, los desarrolladores definieron cómo el vehículo sin conductor detecta a los peatones y otros coches que se cruzan en su camino y se detiene de forma fiable cuando se encuentra con un obstáculo. También, establecieron comunicaciones seguras entre todos los componentes del sistema y tomaron medidas para garantizar la activación fiable de la maniobra de aparcamiento.