El presidente Faconauto, Gerardo Pérez, mantuvo el pasado 22 de diciembre una reunión de trabajo con el presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre. La reunión sirvió para analizar el momento que atraviesa el sector de la distribución y reparación de vehículos. En la misma se repasaron además los retos a los que se enfrentan los concesionarios y el resto de empresarios, como son la transición ecológica, la digitalización y la cohesión social y territorial.
Gerardo Pérez explicó la labor que está desarrollando la patronal de los concesionarios. Ante su homólogo de Foment del Treball defendió que el mayor patrimonio del sector son los 152.000 puestos de trabajo que generan, un empleo de calidad, de carácter indefinido, con alto nivel de cualificación y que, como elemento diferencial, crea riqueza por todos los rincones de la geografía nacional. Salvaguardar esa riqueza local es uno de los retos que, a juicio de Faconauto, se deben abordar y que discurre junto a otras dos transformaciones: la digitalización y la transición ecológica. Todas ellas no se entienden sin un impulso decidido del talento y sin la necesaria cohesión territorial, ya que el futuro de la automoción y su influencia pasan por todo ello.
En este sentido, el presidente de Faconauto destacó el papel de los concesionarios como vertebradores sociales, ya que están presentes en cada pueblo grande o capital de provincia. Además, subrayó que sus inversiones son 100% nacionales y no deslocalizan su actividad, y que son impulsores decididos de la digitalización y de la descarbonización de la economía.
Reivindicar el papel del empresario
“Empresas y trabajadores necesitamos aliados que empujen la actividad económica creadora de riqueza local, responsable y sostenible, donde el empleo es la pieza clave. Necesitamos, en definitiva, que nos ayuden a la consecución de los fines últimos de la actividad económica: asegurar el bienestar de los ciudadanos. En un contexto tan complicado como el que estamos viviendo es el momento de reivindicar nuestro papel como empresarios, nuestro papel social y nuestra participación esencial en la transformación del país”, afirmó Gerardo Pérez.
Por su parte, Josep Sánchez Llibre, compartió la preocupación por la situación de la industria automovilística en España donde supera el 11% del PIB y ocupa el 9% de la población activa, y especialmente en Cataluña donde tiene un peso muy significativo. De hecho, España es el octavo país del mundo en fabricación de automóviles y el segundo de Europa después de Alemania. El presidente de Foment subrayó asimismo la “necesidad de reforzar e impulsar el futuro de la industria del automóvil con dos ejes principales: contribuir a la descarbonización y a la digitalización del sector. Los fondos europes Next Generation suponen pues una gran oportunidad también para el sector”, destacó.